Blog

El aroma y su forma de programarte.

Te apuesto que no te olías esto….

¿Recuerdas qué aromas eran los que envolvían tu infancia? 

El olor de una tarde de lluvia mientras tu madre horneaba un pastel de naranja con chocolate, el perfume de tu abuela, la vainilla y canela de las cenas navideñas… 

Cuando recuerdas estas imágenes, las neuronas en tú cerebro utilizan muchísima electricidad para lograr formar el holograma de esa memoria.

Lo que pocos saben es que al estimular el olfato mediante olores, el esfuerzo que hace el cerebro disminuye y como consecuencia, eres capaz de viajar en el tiempo en un segundo. 

Hasta ahora las investigaciones científicas, psicológicas y las diferentes terapias holísticas no han podido comprender el efecto de los aromas más allá de que su estímulo nos lleva a lo que llamamos el pasado, abriendo la caja de archivos fotográficos que tenemos guardado en nuestro subconsciente. 

Sin embargo, mientras nuestra percepción del tiempo y realidad se expanden, 

¿Te imaginas qué increíble sería que un olor te de acceso al “futuro” para así programar nuevas sensaciones y que en un segundo te permita evocar una vivencia específica sin asociarla con tus memorias y traumas del pasado? 

Yo si me lo imagino, de hecho sé que es posible.  

Pero, ¿cómo se hace? ¿cuáles son los mecanismos neuronales que ayudan a esto? 

Te lo explico de manera básica con  un poco sobre la neurociencia del olfato. 

EL OLFATO ES EL SENTIDO DEL RECUERDO

El olfato activa los archivos de memoria de nuestra vida. Las memorias evocadas por los aromas son más fuertes que aquellas evocadas por sonidos o imágenes.

El 35% de los recuerdos emocionales vienen dados y grabados por tu sentido del olfato (esto es ?) y lo hace por medio de una parte muy pequeña de nuestro cerebro que se llama el bulbo olfativo. 

El bulbo olfativo, conocido como el “ojo del cerebro”, es la parte que se encarga de procesar olores y contiene un grupo de neuronas bastante grandes (similares a las de otros mamíferos) y que nos permiten “ver”, recibir y discernir información del entorno con un mayor rango. 

Esto convierte al olfato en una de las puertas principales que tenemos para percibir el mundo no sólo con un significado racional sino también sensorial, y nos permite grabar la información trabajando con jerarquías cerebrales que se encargan de la distribución de emociones, atención, programación y formación de historias autobiográficas. 

Entonces, ¿cómo es que el aroma nos ayuda a desasociar los traumas del pasado con las vivencias del presente?  Para contestar esto debo hablarte brevemente del tiempo.  

EL TIEMPO Y EL AROMA. 

CÓMO UN AROMA AYUDA A GRABAR UNA MEMORIA. 

Una memoria es un recuerdo en el tiempo. 

¿Pero qué es el tiempo?

Poniéndolo fácil, el tiempo es una estructura que te permite dentro del espacio tener varias experiencias por un periodo de duración. 

La memoria es la acumulación de esas experiencias. 

De manera teórica y lineal se dice que la vida en la tierra tiene un tiempo pasado, un presente y un futuro. 

Pero cuando NO separamos el tiempo de esta manera, toda la información (memoria) está dentro de esta única estructura.  

Y a pesar de que esté de moda hablar sobre las “ líneas del tiempo” realmente en la estructura del tiempo no existen líneas solo existe un punto. 

En este punto gravitacional que le podemos llamar “cero”  sólo existen 2 instantes 

(o presentes): 

El primero es el instante que percibes y vives por medio de nuevas experiencias.

El segundo es el instante imperceptible que colapsa en la experiencia (“presente”) la información programada que tiene la memoria (“pasada”).

La activación de nuestro sentido del olfato, por medio del aroma, nos ayuda a rastrear las memorias en ese tiempo imperceptible permitiéndonos entrar a la caja de archivos (subconsciente) y así mismo nos permite programar memoria  activando la anticipación. 

¿Qué quiere decir esto? Así como un oso puede anticipar que el invierno está por llegar para preparar antes su cueva y tener todo lo que necesita, nosotros al activar nuestro olfato podemos anticiparnos a situaciones y calmarnos para variar los patrones de conducta y resultados en nuestra vida. 

Pudiéramos decir entonces que nuestro cuerpo se vuelve una antena biológica receptiva a todas la memorias de la vida en la tierra dentro del tiempo y el espacio, y que el botón de encendido de nuestra atena es la consciencia de nuestra nariz. 

Por eso, si tu <nametag> quieres saber cuales son las memorias inconscientes que te sabotean  y quieres  programar nuevos hábitos  incluir el aroma en tus prácticas es lo primero (en anclaje te explico más a profundidad cómo hacerlo).

Este conocimiento me ha impulsado a hacer investigaciones más profundas sobre el sentido del olfato y aplicar el aroma para el desarrollo personal y la salud mental dentro de mi trabajo. 

Por eso  “reclamo” que la ciencia, terapias alternativas y misticismo sigan promocionando y popularizando la visualización como la única práctica efectiva para evocar emociones, afectar a las células en el cuerpo y transformar nuestro sentido de identidad. 

Hay mucho más por descubrir detrás de las maravillas que el olfato, los aromas y las plantas están haciendo por nosotros . 

Y por eso lo comparto y soy parte de esta revolución sensorial… 

Para mi la olfatoterapia es la nueva  forma de “hacer terapia”, por esto la incluyo como herramienta innovadora dentro del sistema de Anclaje (que by the way ya  puedes entrar a la lista de espera para el siguiente grupo en sept)

En conclusión, te invito a que uses el l aroma por que  te da la facilidad de hacer un rediseño completo en tu caja de memorias y asociar nuevas respuestas.

Con Amor.