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De la comparación a la inspiración.

 

Como aprovechar la ley de gratitud para transformar patrones de envidia. 

Siguiendo con el tema de estos días, la gratitud, en esta última dosis de Nov quiero que evaluemos cómo usar esta ley a nuestro favor para transformar los patrones de comparación, competencia y celos (o cualquier otro patrón inconsciente que se derive de ese programa) para no te sigan deteniendo a conseguir lo que quieres. 

 

Ya sabemos que la gratitud es lo que hace que tu mente vea los caminos donde todas las cosas ya están para ti y de hecho vea miles de posibilidades. 

 

Y por otro lado cuando estás todo el tiempo detonad@ por los celos y la comparación estoy segura que no avanzas hacia lo que quieres. Mas bien te quejas de lo que no tienes. 

 

 Los celos y la comparación son sensaciones que todos sentimos pero pueden ser dragones silenciosos que desatan un fuego que nos quema. Sin embargo, podemos canalizar esa sensación y ampliar esa percepción hacia algo más grande: hacia la inspiración. Desde este punto, podemos  redefinir esos momentos en instantes creativos en lugar de destructivos. 

 

¿Cómo aprovechamos la sensación de celos o envidia, para acercarnos hacia lo que deseamos? 

 

Lo primero es invertir la lógica.

 

Cuando sentimos la necesidad de comparar o juzgar ¿cómo podemos reformular lo que vemos como una extensión de lo que es posible para nosotros?  Para usarlo como inspiración y expansión. 

 

Por lo general lo que comparamos y envidiamos de los otros son cosas que deseamos tener o hacer, pero el ego (lo que piensas sobre ti mismo) te dice que por alguna razón tu no puedes tenerlo. O por el contrario,recalca lo que no tienes y deseas que otros tampoco lo tengan. 

 

La próxima vez que tengas un pensamiento de comparación o envidia, en vez de caer en el espiral de diálogos que propone la mente, intenta invertir tu atención y en vez de etiquetar ese pensamiento como “celos” o “comparación” desde una preceptiva negativa,  míralo como una parte más profunda de ti que surge para mostrarte lo que realmente quieres. 

 

Las emociones de celos y envidia (que son distintas) se desvanecen cuando dejamos de creer en este diálogo mental inconsciente. Cuando tomes consciencia de ellos podrás avanzar y expandirte hacia lo que quieres .

 

Así que la próxima vez que sientas celos, quita la etiqueta + el nombre de la emoción y en su lugar, di: “Wow, gracias por mover las cuerdas de mi corazón y mostrarme lo que REALMENTE quiero».

 

Si aplica La Ley de Gratitud, verás que las personas en estas situaciones de envidia son personas expansivas que vienen a mostrarte todo el potencial que tienes por incluir  para potenciar tu vida. 

 

EJERCICIO–

Haz una lista de cosas o personas de las que estás celoso. ¿De qué estás realmente celoso? ¿Cuál es la historia subyacente? ¿Qué te atrae cuando ves en ellos pero tu mente te hace creer que no podrás tenerlo o es “malo” ser igual?

Eso te ayudará a ver TUS JUICIOS. Ellos son el resultado de vivir sin usar la gratitud como ley. 

A continuación, escribe una lista de todas las formas en las que te comprometes a desbloquear tu potencial para tener esto que quieres y cómo lo vas a lograr.

Finalmente, para despejar la energía, regresa a esa persona y experimenta desde la GRATITUD. Piensa en algo agradable o inspirador sobre ellos o esa situación específica que te genera envidia y/o comparación. Bendícelo. Aplica la ley y diles:  “Gracias por mostrarme estas señales sobre mi visión que pueden haber estado escondidas en las sombras”.

Con Amor.