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Sobre tus sueños, la lealtad y como todo tiene fecha de expiración.

Esto empieza así.

Un deseo, grande o pequeño, sobre el trabajo, el éxito, la cantidad de dinero, sobre lo personal, una relación, familia, espiritualidad, etc. Fuese cual fuese ese deseo, lo conseguiste. Lo viviste, te comprometiste, le diste 10 años de tu vida, el universo conspiró contigo en ese punto (pues era el camino que siempre habías soñado) y hoy reconoces que ya no lo quieres.

Ya no funciona para ti, lo quieres más grande, renovado, vivirlo desde nuevas perspectivas, destruirlo y construir uno nuevo para que te llene con flameantes sensaciones y aprendizajes.

Tu deseo se expiró.

Llegar a ese entendimiento es lo que llamo capacidad de expansión. Es reconocer que todo en esta vida tiene fecha de expiración, que va a cambiar de forma para hacerte crecer o darte algo mejor.

Dejar ir eso que ya no te funciona y que realmente no deseas requiere de “ovarios”, de gran iluminación y cruda honestidad. Es un acto de valentía.
Por otro lado, admitir que ya no lo quieres no es fracaso, es la puerta para el éxito.

Pero aquí viene lo que nos detiene:  El sentido de lealtad.

Según nos han enseñado (y si revisas el significado en un diccionario) la lealtad es un valor importante que básicamente consiste en nunca darle la espalda a determinada persona o institución.  Ajá, es como si estuviéramos predispuestas a nunca dejar eso, que escogimos serle fiel.

“Yo dije que lo quería, cómo me voy a sabotear” “ Hice un compromiso e inversión enorme cómo voy a dejarlo” “Dije que lo amaba y ahora ¿dónde se queda todo este amor?”

Ser leal a lo que decimos es un acto humano. Pero hay que considerar que es más humano, ser fiel a lo que sentimos.

Si ya no funciona, no funciona, si ya no te llena, ya no te llena, si ya no lo quieres, ya no lo quieres. Ninguna promesa, por más grande que sea va a cambiar esa sensación. Ninguna excusa por más lógica que sea, va a tapar ese nuevo deseo de crecimiento.

¿Tu sentido de lealtad es hacia lo viejo o hacia lo nuevo? ¿Es hacia ti o es hacia otros? ¿Es por seguridad o por libertad?

Deja que la lealtad te mueva hacia donde quieres estar.

No estás obligada a sostener algo que no te llena.

Acepta que las cosas expiran, que necesitan renovación, crea una nueva promesa que ponga en moción la creatividad de tu corazón.
Con amor.

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